Independientemente de las características y de los fines productivos de los locales comerciales, estos están expuestos a un movimiento constante de personas, bien sean clientes o amigos de lo ajeno que esperan su mejor oportunidad para dar su gran golpe. Por ello es importante, entre otras cosas la contratación de un seguro de comercios si tienes un local comercial.

El seguro de comercio está ideado para proporcionar tranquilidad a los propietarios y trabajadores de un comercio frente a diferentes tipos de riesgos, que pueden afectar el dinamismo normal del comercio, trayendo bajas e incluso cierre del mismo. En ese sentido el seguro garantiza en cierta parte la seguridad del negocio.

Entre los riesgos más comunes se encuentra el robo y los daños que pueden ocasionar los personajes de esos actos vandálicos al entrar por la fuerza a un local comercial. De tal manera que son los primeros riesgos que los propietarios tratan de incluir en sus pólizas, no obstante, existe una amplia variedad de riesgos que pueden afectar al local y que sin duda deben estar asegurados para que la indemnización pueda realizarse.

Principales coberturas y garantías en seguros de comercios

Como ya mencionamos los robos se encuentran como los partes de siniestros más comunes en el caso de los locales comerciales, seguido de los incendios, los daños ocasionados por agua y actos de vandalismo en los que se incluye rotura de objetos y deterior de las superficies de las fachadas.

Es importante al realizar la contratación del seguro, analizar todos los riesgos que pueden generarse de este tipo de siniestros, estableciendo las prioridades con el concepto claro de protección, garantizado capitales suficientes para las diversas situaciones, permitiendo así la continuidad del comercio en caso de imprevistos.

En este sentido el capital asegurado debe poder cubrir perfectamente la totalidad de los bienes o asegurados principales, de manera que en caso de cualquier tipo de siniestro el propietario reciba la indemnización en una cuantía que permita la cobertura completa de los daños sufridos, acogiendo bajo coberturas de seguro a primer riesgo diferentes partidas que no resultan tan fáciles de valorar.

Dependiendo de las características del negocio las pólizas serán completamente diferentes, por ejemplo, si se trata de un despacho de abogados recuperar información de documentos, información informática, entre otras podrían ser lo más importante, mientras que, en el caso de una boutique, los daños en el valor de la mercancía serian lo fundamental en destacar en una póliza de seguros de comercio.

En el caso de los locales comerciales los seguros buscan garantizar la cobertura en igual importancia del continente y del contenido. En el caso del continente el capital debe garantizar la reconstrucción e instalaciones del comercio, mientras que el contenido debe asegurar el coste del mobiliario, la mercancía y los enseres del mismo.

Entre las coberturas básicas de los seguros de locales comerciales se encuentran las siguientes:

Los daños por problemas de agua, inundaciones, explosiones, dalos eléctricos, robos, actos de vandalismo o fenómenos naturales, se encuentran entre los principales riesgos que puede sufrir un local comercial por lo que son considerados en la mayoría de las coberturas básicas de un seguro de comercio.  No obstante, en función de la actividad del local comercial se le deben añadir coberturas específicas que en su momento resguarden la actividad del negocio y evite la perdida de los ingresos.

Si las instalaciones son un arrendamiento, es decir que el local como tal no es del negocio, sino que se paga un alquiler, no es necesario que coberturas para el continente sean incluidas dentro de la póliza, ya que es el propietario del lugar el que debe costear un seguro para garantizar el funcionamiento de su propiedad. No obstante, es posible que una cobertura haga al propietario responder frente a la estabilidad de la propiedad en caso de siniestros.

De igual forma, es muy importante contar con un seguro de responsabilidad civil, que cubra al local comercial frente a reclamaciones por parte de terceros, o pueda responder frente a reclamaciones por problemas con la mercancía. Dentro de esta cobertura se incluye, además, la reclamación de terceros por accidentes que pueda sufrir en las instalaciones del mismo.

La responsabilidad patronal también es muy importante para cubrir los daños a empleados que ocurran dentro del negocio y que la responsabilidad recaiga sobre la empresa.